lunes, 29 de diciembre de 2008

DEL "DIRIGISMO" AL FMI


En la votación sobre el blanqueo de capitales, el gobierno estuvo al borde de una derrota política de las dimensiones de la producida en el Senado con el voto "no positivo" sobre las retenciones. El título referido al blanqueo obtuvo sólo 128 votos y el desgranamiento del bloque K se expresó en el voto negativo de aliados hasta ahora prácticamente incondicionales del oficialismo (Encuentro Popular y Social), que se sumaron a los que se fueron antes (Solá) y a los ausentes del bloque de Santa Fe, dirigido por Obeid, lo que podría haber tenido la inspiración de Reutemann. Antes de esto, el Frente para la Victoria había perdido por primera vez una votación en la Cámara de Diputados, referida en este caso al rechazo al veto presidencial a la Ley de Glaciares -que no alcanzó, de todos modos, para quebrar el veto redactado por las mineras.

Existe, por lo tanto, una tendencia objetiva a la disgregación de la camarilla kirchnerista. De ahí el esfuerzo del matrimonio por dotarse de una "malla de seguridad" con base en el PJ y en la mafia de intendentes del conurbano. El nuevo intento de una nueva concertación es un proyecto "moribundo" (Clarín, 14/12); incluso "los gobernadores que mejor miden (en las encuestas) en sus territorios... han sabido tomar en algún momento distancia del matrimonio presidencial".

La crisis mundial

En la sesión de la Cámara de Diputados que trató el paquete de medidas ante la crisis, quedaron expuestas las grandes líneas políticas de la burguesía. Aguad, en nombre de la UCR, denunció que "el Estado argentino no tiene recursos económicos para hacer frente a esta crisis solo" y propuso "lograr un acuerdo" con "los sectores que tienen que poner los recursos económicos", o sea los sojeros y el FMI (con el cual Aguad pretende renegociar la deuda externa).

Detrás de este planteo gira toda la oposición patronal, incluido el "socialismo", y está en línea con lo planteado por Prat Gay, de la Coalición Cívica, y el peronismo "disidente". La devaluación "de una vez y profunda" significaría una demolición de los salarios, un negocio redondo para los que protagonizan la fuga de capitales y un golpe a la política intervencionista del gobierno. El ex banquero Roque Fernández advirtió que podría provocar otra hiperinflación (Ambito, 15/12).

Techint puede estar de acuerdo con la devaluación que propone la oposición patronal, pero no con el plan de rescate en manos del FMI, desde el momento que éste significa un derrumbe del mercado interno, que es una pieza clave en el mantenimiento del "cluster" de Pymes que sostiene el pulpo de los Rocca, cuando tienen por delante una caída vertical de las exportaciones. El "capo" de Techint acaba de pedir protección frente a las importaciones de China y Brasil, en oposición a lo que plantearía el FMI, y una "política" para el sector agropecuario que dinamice el mercado de la maquinaria agrícola, del cual Techint es proveedor.

Pero si el gobierno no levanta del 25% en las encuestas, la oposición, por su lado, está atomizada y tampoco atrae el electorado. Margarita Stolbitzer ha anudado pactos con los ex radicales K y ha abierto una negociación con Solá. Sin embargo, fruto de sus "conversaciones habituales con Mauricio Macri", Solá ha dejado correr la hipótesis de su candidatura en la provincia y la de Michetti en la Capital, como parte de un mismo bloque político (Clarín, 12/12).

¿"Vivir con lo nuestro"?

La intervención de Agustín Rossi, en misma sesión de la Cámara de Diputados, expuso el otro polo de la política patronal: "Si la crisis está en el centro del poder (Estados Unidos), éste tratará de resolver su propia crisis y habrá poca liquidez para los países emergentes, por lo que la alternativa es ‘vivir con lo nuestro'". ¿Pero el gobierno es capaz de sostener una economía dirigida y reglamentada? No es lo que demuestran los 25.000 millones de dólares que se han ido del país desde septiembre de 2007. El gobierno estaría por lanzar un nuevo canje de bonos de deuda de corto plazo por otro de plazo mayor, que está manejado por el Citibank y el Deutsche Bank -o sea que será un premio a los banqueros y no una medida unilateral para parar la hemorragia de la deuda externa.

El gobierno está llevando a la nación -y a la propia camarilla-, a un callejón sin salida, en la medida que es incapaz de enfrentar la crisis con medidas que ataquen la propiedad privada de banqueros y exportadores. Esta es la base más general de la descomposición política del oficialismo y de la diáspora que va quebrando su base de apoyo.

Pero tampoco tiene excluido su propio acuerdo con el FMI. Mario Brodersohn (UCR) le dijo a Clarín (14/12) que "es posible que el gobierno, con la aparición de Obama, con las nuevas regulaciones del mercado financiero internacional, empiece a decir que vamos a tener un FMI progresista (y) a estar más predispuesto a endeudarnos. Es posible que haya un cambio, un giro de 180 grados".

El centroizquierda y el Frenapo

La CTA, que viene de protagonizar una movilización reducida y dividida, se ha declarado fuera de una agenda de intervención en la lucha de clases. Toda su preocupación gira en torno de las combinaciones electorales de 2009, con la pretensión de que "a la izquierda de Kirchner ya no hay una pared. Estamos nosotros" (Clarín, 13/12). Claudio Lozano ha hecho un llamamiento al sector de Diálogo por Buenos Aires (Bonasso, Ibarra, Heller), a diputados de Juez y a Martín Sabatella -intendente de Morón-, para constituir un bloque parlamentario. Solanas ha ido a visitar al propio Juez, un representante de los sojeros y los capitales automotrices, para formar un "frente nacional".

Claudio Lozano ha denunciado que "se está convalidando un proceso de devaluación progresivo para congraciarse con los exportadores", pero sus aliados (Buzzi) reclaman una mega-devaluación.

La burguesía, entonces, oscila, ante la crisis, entre el dirigismo para no caer en "default" y seguir pagando la deuda, y la mega-devaluación y un préstamo del FMI. El fracaso del dirigismo lleva a esta segunda variante. Brasil la ha transitado en parte, porque ha hecho una importante devaluación y ha recibido un préstamo enorme de la Reserva Federal. Pero la crisis sigue y todo esto se queda corto. La mega-devaluación y el acuerdo con el FMI será el estallido final del período abierto por el ascenso del kirchnerismo.

Christian Rath

sábado, 13 de diciembre de 2008

FMI O GOBIERNO DE LOS TRABAJADORES



Es necesario volver a decirlo: el gobierno nos está llevando a un colapso económico debido a su incapacidad para enfrentar la crisis capitalista con medidas draconianas contra la libertad de acción de la clase capitalista. Argentina se encuentra en un contexto de derrumbe de las relaciones económicas internacionales, caracterizadas por una seguidilla de quiebras de empresas y bancos -e incluso de naciones enteras (como en el este de Europa y el Báltico)-, y por la incapacidad de los Estados y de los bancos centrales para relanzar las operaciones de la economía, esto a pesar de la inyección de sumas billonarias de dinero. Las decenas de miles de millones de dólares que el Congreso norteamericano prevé entregar a los tres pulpos automotrices del país no apuntan, ni en la intención, a revitalizar a la industria, pues las disposiciones del rescate establecen la liquidación de los convenios laborales, el ‘default' parcial de las deudas con autopartistas y el cierre de plantas. A la parálisis de los mercados monetarios y del crédito interno, se ha sumado en los últimos días el colapso del crédito internacional, mediante una drástica reducción de las cartas de crédito que financian el comercio exterior de los llamados países emergentes.


En este marco, el gobierno ha dispuesto dilapidar los fondos de la Anses, engrosados por el dinero de las AFJP, en un plan de subsidios sin futuro (desvalorización de los dineros de la Anses) a las automotrices locales y a los bancos. En lugar de supervisar en forma directa la utilización del dinero en un plan para resolver problemas estructurales, el gobierno licita los fondos de la Anses a una industria suntuaria, y lo hace por medio de los bancos, cuyas mesas de dinero son los principales canales para la salida de capitales del país. En un contexto de tasas de interés que llegan al 100% anual, se les da a los bancos un incentivo extraordinario para el desvío de fondos.


El retorno a un sistema de ahorro previo está destinado a alimentar a las concesionarias, que no dejarán de usar los anticipos para operaciones temporales más lucrativas. De ningún modo reactivarán a la industria o impedirán las cesantías, por la simple razón de que el colapso es mayor que la aspirina que se administra: la industria automotriz en Brasil, de la que depende la argentina, asiste a un verdadero derrumbe: la mitad de los trabajadores (60 mil) recibieron vacaciones adelantadas, los patentamientos cayeron un 30 por ciento y la producción de noviembre, un 40 por ciento (El Cronista, 5/12). El viernes 5, la moneda brasileña, el real, sufrió un verdadero descalabro cuando el banco central no pudo controlar una enorme salida de capitales. El crédito brasileño, colocado para el consumo a tasas de interés usurarias, se encuentra paralizado (Financial Times, 8/12).


¡El gobierno quiere financiar una reactivación de la economía sin tomar antes el control de los bancos, por donde se fugan los capitales, e incluso quiere hacerlo transfiriendo a los bancos el excedente previsional de fondos del Estado! Por eso la devaluación en curso es imparable y constituye un drenaje constante de recursos. La desvalorización del peso frente al dólar no obedece en absoluto a un desequilibrio comercial, pues junto a la caída de los precios de exportación caen los precios de importación (el costo de los fletes marítimos cayó un 80 por ciento), y junto a la caída de la demanda mundial hay una caída de la demanda nacional de productos extranjeros. El peso no se desvaloriza por falta de competitividad sino debido a la salida de capitales, y porque el default financiero internacional (los seguros para cubrir una cesación de pagos están por las nubes) pone en jaque a todas las monedas que se financiaron con capital extranjero, como el real brasileño, el won coreano y hasta la libra esterlina, e incluso el rublo ruso (porque tiene una deuda privada externa gigantesca, que supera el incremento que registraron sus reservas en divisas). Como la divisa que más se financió con capital externo fue el dólar (la deuda externa neta norteamericana es de cinco billones de dólares), al final de la presente especulación con los bonos de Tesoro de Estados Unidos se prevé su derrumbe y un dislocamiento monetario internacional. Una megadevaluación del peso no mejoraría la posición comercial de Argentina sino la rentabilidad de los exportadores, pero además encarecería el peso de la deuda externa en dólares y adelantaría los tiempos de un ‘default' y de un pedido de rescate al FMI.


Es lo que acaba de reclamar Prat Gay, el banquero preferido de Carrió, que de este modo convierte a la intervención del FMI en la salida política de toda la oposición patronal, incluida su pata socialista. Es lo que también reclama un ‘progresista', Bernardo Kosacoff, presidente de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), que bajo la exigencia jeroglífica de "recuperar la demanda de pesos", alude a la necesidad de cortar la demanda de dólares por medio de una devaluación y de un programa de estabilización del FMI. Es lo que acaba de reclamar también el Banco Itaú, el más importante de los brasileños, para rentabilizar su acaparamiento de dólares, tanto de las reservas argentinas como brasileñas (por eso ha apoyado la devaluación del real y mucho más el convenio del Banco Central de Brasil con la Reserva Federal para financiar la salida de dólares con un préstamo norteamericano renovable).


En Europa oriental, estos programas se están cobrando miles de cesantías entre los empleados públicos y la reducción de los sueldos, además de una feroz contracción de la economía. La falacia de todas estas recomendaciones reside en el hecho de que la crisis (recesión, depresión, quiebras) consiste precisamente en el atesoramiento del dinero (demanda de atesoramiento) y, por lo tanto, en la caída de su demanda para crédito y transacciones comerciales, en la forma que sea de moneda nacional -por eso hay una huída de todas las monedas (la moneda más sólida del planeta, el yen japonés, tiene demanda negativa para crédito y comercio, por eso paga cero de tasa de interés, al igual que lo que ocurre con los bonos del Tesoro norteamericano a uno y tres meses, que se cotizaron a cero interés la semana pasada). La megadevaluación del peso convalidaría la fuga de capitales (premiaría a los que fugaron) y representa un enorme negocio para los bancos y capitalistas que dolarizaron sus activos, pero va a provocar la contracción de la economía (la contracción del mercado interno) y a disparar una inmediata dolarización de los precios. Los sojeros preparan una nueva ofensiva para la semana que viene, por una razón que habla por sí sola: tienen acaparadas aún diez millones de toneladas de soja, que quisieran vender a un precio más alto en pesos (el sojero Binner es partidario de la devaluación en escala e incluso del rescate del FMI).


La crisis, sin embargo, no exige devaluar nada; la devaluación es un planteo interesado de un sector de capitalistas. Es necesario nacionalizar los bancos, cortar la sangría de la deuda externa y poner fin al acaparamiento de cereales por parte de los capitalistas de la soja y de los pulpos de la exportación. Con estos recursos en la mano hay una amplia viabilidad para un plan público de infraestructura y de industrialización, que se deberá complementar con convenios comerciales bilaterales, que sean funcionales a este plan. Pero como el punto de partida de esta salida lo constituyen medidas anticapitalistas, hay que excluir que las adopte el kirchnerismo, que será tragado simplemente por el torrente de la crisis y cuya descomposición política está a la vista (hasta Depetri admite que puede perder en la provincia de Buenos Aires). En el desarrollo de un plan de salida a la debacle capitalista, los trabajadores deberán asumir la tarea de control y gestión de la economía en todos sus niveles, algo fundamental en cualquier salida popular pero que el nacionalismo burgués no admitiría bajo ninguna forma. La salida a la crisis capitalista plantea un cambio de régimen político, de una u otra manera: FMI o gobierno de trabajadores.


Jorge Altamira

lunes, 1 de diciembre de 2008

ELPRESUPUESTO EN PROVECHO DE UNA ELITE, EL TRABAJADOR MUNICIPAL OTRA VÍCTIMA


Cada tanto, periodistas, funcionarios o cualquier vecino de Lanús repiten “el 65 % del presupuesto municipal se va en salarios” y entonces comienza una frenética revisión de por qué se gasta tanta guita en “tanto” personal para administraciones que funcionan casi a pedal.

La organización del trabajo municipal en el capitalismo no puede ser solidaria, debe necesariamente reproducir el sistema de relaciones sociales imperantes, es decir la explotación por parte de un grupúsculo de las fuerzas de trabajo de la mayoría. En las comunas se reproduce la forma de gobierno de camarilla instalada desde hace rato a nivel nacional y cada puntero y hasta otros partidos “opositores” tienen asignada una porción del plantel para su “tropa”. Asesores y ñoquis juegan un papel a la hora de montarse cajas negras, que bajo rimbombantes nombres desvían partidas presupuestarias.

Aunque la organización de las tareas generales la dirija un equipo de creativos (Lanús no es el caso), éstos no pueden romper el esquema de la explotación y el sometimiento a un ordenamiento genial o ridículo del cual el trabajador es un mero prisionero.

Bajo este análisis no se debe de ninguna forma hacer caer la responsabilidad de la impericia patronal sobre los trabajadores. Por el contrario lo que debe revisarse detenidamente son las formas de pago, si se efectúan los aportes a Cajas de jubilaciones y a Obra Social, cuáles son las formas de trabajo precario (en negro, horas cátedras, contratos, pasantías, etc.). Porque las violaciones a la legislación laboral en vigencia terminan afectando a los municipales en su doble papel, como asalariados y como contribuyentes que son, quienes pagan los desaguisados de los distintos gobiernos.

La historia de los municipales es de salarios por debajo del mínimo establecido por ley, cero capacitaciones, nunca recategorizaciones. Los ascensos e ingresos de personal sólo son para familiares del círculo más estrecho del Ejecutivo o para elementos afines. El ascenso por concurso no existe en un régimen de punteros, porque esa instancia de examen público revaloriza al trabajador como un ente independiente y lo sustrae de manoseos y dependencias.

Con Quindimil los municipales precarizados llegaron a ser el 30 % de la planta municipal (Inforegion 14/2/08), cifra que mantiene una coherencia con todo el cuadro de empleo en negro que es del 40 % y aunque es delito, liderado por los gobiernos Nacionales, provinciales y municipales.

Con Díaz P. no hubo cambios, si se consideran los dichos del concejal K y secretario del Sindicato Municipal San Vicente, Carlos Vergara, “muy pocos municipios han cumplido, lo que prevée la Ley para todos los que están contratadas por más de un año pasen a planta permanente”. San Vicente está lejos de Lanús ytal vez no lo sepa el gremio ni la patronal pero el reclamo de efectivización efectuado por Aguirre, Gauna, Alcetegaray y Balada, empleados del Tribunal de Cuentas de Lanús con 7, 8, 10 y 11 años de trabajo (La Defensa), es la punta de un témpano que más temprano que tarde va a irrumpir en la plácida relación existente entre el gremio y la patronal, donde el 30% del personal no tiene derechos gremiales.

Un dato importante de la distribución de la partida salarial es que 1500 personas de conjunto cobran $ 1.500.000, mientras que un solo individuo (el intendente) cobra un salario igual al de 35 de esas personas condenadas a la indigencia, o lo que cobran 233 Planes sociales.

Luego habría que analizar de qué se tratan algunos números presentados a la sesión extraordinaria del consejo, para ampliar el presupuesto, por ejemplo Gestión Ambiental que gastó en 9 meses $ 3. 800.000, cuando todo el distrito sufre de la más absoluta desprotección ambiental. O el $ 1.100.000 que se gasta mensualmente en ¿convivencia y seguridad? O los $ 400.000 mensuales que se distribuyen en los rubros “Intendente, sus colaboradores cercanos y la Jefatura de gabinete”.

De la
sesión especial del Consejo, por la rendición de cuentas(3/9/08), surge que estas partidas ejecutadas mes a mes implacablemente contrastan con la desidia de la Secretaría de Cultura para distribuir $ 7.000 en becas destinadas a pibes en edad escolar como ayuda. O el caso de “Ayuda Social” que teniendo $ 12.800 (muy poca plata para semejante desastre social en el distrito) tampoco lo distribuyó. Pero el caso más patético es el de la Secretaria de Desarrollo Humano que teniendo en caja 5 millones destinados a ayudas sociales a personas y alimentos para indigentes y personas carenciadas del distrito, no sólo no lo hizo sino que castigó a las organizaciones de desocupados que denunciaron la desnutrición infantil y cuando estas organizaciones reclamaron para todos los comedores populares una dieta balanceada y no chatarra, Karina Nazabal y Daniel Ledesma señalaron que el municipio se podía hacer cargo de dar $ 1,80 por comensal (30 %) cuando la dieta individual en marzo costaba $ 6. Estos funcionarios, sin vergüenza, se reúnen para no permitir que se baje la edad de imputabilidad, pero ellos son quienes condenan a la discapacidad de por vida a muchos niños.

Como la contratación de Personal Temporario (horas cátedras y contratados) permite manejos de toda índole, la Secretaría de Cultura que tenía un presupuesto de ¡$ 2.261.814! gastó $ 3.163.067 es decir casi 1 millón más. Lo mismo sucedió en “Promoción del deporte” donde el verdadero juego fue contratar personal temporario por $ 4.676.000. Por supuesto a estas cajas negras las han ayudado enormemente los superpoderes dados al Intendente por el Consejo Deliberante, así se pueden reasignar las partidas presupuestarias y como prestidigitador, regatear con tapitas a un público cándido, que nunca termina de saber debajo de cual tapa está lo que se busca. Luego estan los 50 palos de Covelia para higienizar 40 KM2

La crisis capitalista internacional está fogoneada por estas políticas de saqueo. El déficit fiscal recorre Nación, Provincias y Municipios. En manos de los punteros que dirigen vamos a una catástrofe sanitaria, educativa, habitacional y de los servicios. Los trabajadores debemos impulsar reuniones y debates por un plan de lucha y una salida obrera a la crisis.

jueves, 27 de noviembre de 2008

DÍAZ PÉREZ Y SU AMOR POR LOS NIÑOS: UN LLAMADO A LA INCREDULIDAD

Un ejecutivo municipal que gobierna con superpoderes y que uso como campaña una ordenanza presentada del Barrio Las Colonias, que luego sepulto y que incluía, infraestructura, cloacas, agua potable, gas, un hospital nuevo en Jardín y Caraza y un plan de viviendas para varios barrios que nunca cumplió, ¿puede mejorar la calidad de vida de pibes hundidos en la miseria?

A un año de gestión como Intendente y a 20 de funcionario Díaz Perez confesó “Los pibes hoy son víctimas de una sociedad armada por nosotros mismos”. Díaz P Nazabal, Gabuzzo, etc. que manejan hace rato cajas que estan destinadas a resolver los problemas de las familias obreras, no han hecho nada. Díaz P. en cambio estableció convenios que distribuyen parte de los recursos, entre las distintas organizaciones que convoco por el Programa NI un pibe afuera. Díaz P. quiere hacer creer a todos que con una campaña publicitaria colorida, contratando espectáculos a precios hollywoodense y con cartón pintado se crea un mundo socialmente distinto.

Su esposa para intentar resucitar la consigna nonata señalo “Todos somos responsables de cada pibe que lleva un arma”. KN no puede desconocer que los niños se arman hastiados de versos y por los padecimientos que les obliga a vivir el funcionariado enriquecido con dineros del pueblo. La existencia del funcionariado que vive tirando manteca al techo les indica a los pibes que no es necesario ni estudiar ni trabajar, el dinero gordo se hace de otra forma. Hay transas que recorrer, mentiras que decir y gana el que engaña a más gente.

Los pibes que se arman ya sacaron una conclusión, para delinquir y no ser molestado hay que ser el más sanguinario y cruel, si llega vivo, va a poder vivir en General Rodríguez en una mansión de u$s 5 millones, custodiado por la policia, amparado por el intendente y solo deberá pagar el peaje cuando se recaude para la campaña presidencial de otro verdugo de niños pobres.

Los que armaron esta sociedad, como DP confiesa, dividida en clases sociales, obligan a vivir a la familia obrera en barriadas donde estan asentados, en la precariedad más bruta, con la contaminación industrial que el municipio permite, con basurales, cocinas de Paco, desempleo, prostitución inducida y el delito organizado no desde las villas sino desde el poder, country y mansiones.

Díaz P., Alicia Márquez y Perez Arrojo que planean darle a las patronales una autovía en La Ribera aunque con eso desalojen a 400 familias ¿pueden sostener seriamente NI un pibe afuera?

Este gobierno hipócritamente llamado progre, esta por detrás del esclavismo Inca que no daba un paso sin censos y estadísticas públicas, para mejorar la vida comunitaria, donde los esclavos tenían garantizado techo y comida. Daniel Ledesma que se jacta de que redujo a 11 los Comedores Populares en todo el distrito, lo hace porque se lo exigieron, estableciendo un paralelismo entre su nivel cultural y el del pibe chorro empujado al delito por el puntero. ¿Puede ser posible semejante dislate cuando suspensiones, recortes de horas extras y despidos asfixian a la familia obrera? Ledesma, el desorganizador de la comunidad, cuando la canasta familiar vale $ 4500, se jacta de que la mamá con más de dos crios puede acceder a una tarjeta para comprar por mes $ 100, revuelve el estomago de todos menos de los empresarios de la tarjeta, del banco que la financia, de los supermercados que tienen una clientela cautiva en época de reseción y de los que muerden el diezmo. En el proceso de ajustarle el cinturón al pobrerío, cerrando comedores, Ledesma no se baso en un estudio estadístico sino en el listado emitido por sus punteros.

Este mismo ¿fraude? ya se hizo con los “promotores de salud” ¿censos, estadísticas? No jodann. ¿Puede un gobierno comunal cobarde a la hora de investigar al quindimilismo, hacer un censo? imposible, porque eso mostraría públicamente las asignaturas pendientes del PJ/FpV, nos enteraríamos del déficit habitacional, cuantos son las personas sin trabajo en el distrito, de los 400.000 pibes que no estudian ni trabajan en GBA, cuantos viven en Lanús, cual es el grado de contaminación establecido aquí. Cuantos desnutridos hay y muchas otras rémoras que jugarían contra la demagogia vacía del oficialismo y la oposición.

Díaz P. puede maquillar la cuestión social e incluso eso esta por verse. Pero darle una salida a los pibes nunca porque, para que eso funcione hay que garantizarle a cada familia un salario igual a la canasta familiar. Debe haber escuelas y según informa Suteba en 16 establecimientos no hubo clases durante 73 días por destrucción edilicia, falta gas, agua, sanitarios rotos, filtraciones, problemas eléctricos, patios y aulas inundadas, etc. La política educativa de Díaz P es su Ley de Educación aplicada a la Escuela 704 de Villa P’ora rehén de las maniobras de uno de sus punteros.

El Programa Ni un pibe afuera, solo sumara más horas cátedras a la nebulosa del plantel general de personal que pagaran los giles ya que quienes gobiernan inflan la nómina todo el tiempo por la coptación y las prebendas. Si queremos humanizar a los brutalizados son ellos mismos mediante su movilización y su enorme creatividad quienes tienen que ser convocados a resolver los problemas y eso no encaja en el programa de la explotación del hombre por el hombre que encarna Díaz P.

Lisandro Martinez
155 690 18 33

lunes, 24 de noviembre de 2008

Balance político de las elecciones de la UBA



Las elecciones de centros de estudiantes de la UBA están prácticamente finalizadas -falta concluir únicamente la votación en Agronomía. La masiva participación de los estudiantes, superior a los 70.000, echa por tierra toda la campaña difamatoria sobre la supuesta falta de representación de las organizaciones estudiantiles. Precisamente por su alto nivel de representación, las elecciones fueron el escenario de una lucha política abierta. Es necesario determinar, ahora, un balance.


A la izquierda


Contra lo que dice el faccionalizado comentarista de Clarín (17/11), las elecciones pusieron de manifiesto una acentuación de la tendencia hacia la izquierda del estudiantado. Lo prueban, en primer lugar, los resultados de la UJS-PO, el exponente más completo de una política socialista. Logramos presentarnos en la totalidad de las facultades y crecimos significativamente en la mayoría de ellas. Obtuvimos la presidencia en tres centros de estudiantes (Psicología, Filosofía y Letras, Veterinaria) y participamos como segunda fuerza en la lista ganadora en Arquitectura. El otro dato relevante fueron las votaciones conseguidas (sea en alianzas o en listas propias) en las facultades masivas y menos politizadas como Medicina, Odontología, Farmacia y Económicas. El jefe de la Franja de Económicas se vio obligado a escribir un artículo en Página/12, no para explicar la victoria de su agrupación sino el 22,4% de votos obtenidos por el frente que integramos. En Sociales perdimos por 200 votos (22,2 a 18,4%), pero quedamos como segunda fuerza y alcanzamos la condición de la agrupación más numerosa de la facultad. Gracias a estos resultados, somos la fuerza con mayor cantidad de centros de estudiantes y de delegados en la Fuba.


El desarrollo electoral y organizativo del PO, al que debemos sumarle el triunfo en el colegio de la UBA Carlos Pellegrini, no puede escindirse de su planteo político socialista. Llamativamente, el diario Clarín (16/11), procura distorsionar este hecho presentándonos en una posición ‘neutral' en oportunidad del conflicto sojero, cuando es notorio que atacamos y combatimos a los dos grupos capitalistas en pugna, y que luego la crisis mundial le dio toda la autoridad a nuestros planteos de nacionalizaciones. O sea que el estudiantado votó una plataforma política perfectamente definida.


El crecimiento en algunas facultades de agrupaciones que se reclaman ‘independientes' ha dado pie a la interpretación de que las elecciones pusieron de manifiesto un retroceso del frente de izquierda que dirigió la Fuba en los últimos periodos, y que esto podría redundar en una nueva dirección de la Federación orientada hacia el ‘centro' o incluso hacia el gobierno. Pero esta modificación sólo testimonia el derrumbe del frente sojero formado por el MST y el PCR, que abandonaron las posiciones de la izquierda para tomar las del capital agrario. Los llamados ‘independientes', por su lado, procuraron mantener, ellos sí, una posición ‘neutral' en ese conflicto; esta ‘izquierda independiente', sin embargo, cerró acuerdos con sectores vinculados con el kirchnerismo y con las gestiones centroizquierdistas. De todos modos, cualquiera sea la tendencia ‘hacia la derecha' de los independientes en materia de alianzas, lo real es que las agrupaciones propiamente kirchneristas se derrumbaron, de manera que un corrimiento de los ‘independientes' hacia el gobierno significaría una desautorización al mandato que emerge del voto ‘hacia la izquierda' de los 70.000 universitarios.


Derrumbe de los ‘sojeros de izquierda'


Fue palmario el retroceso de la ‘izquierda sojera', es decir del MST y el PCR. En casi la totalidad de las facultades donde se presentaron retrocedieron abruptamente. El MST perdió, junto con el PCR e IS, el frente de Filo en manos de El Bloque (PO, PTS), y con ello la presidencia de un centro de estudiantes en la UBA. En el resto de las facultades, en general, no logró superar la barrera del 5%. En términos de delegados fueron reducidos a una fuerza de segundo orden. El PCR, por su lado, también perdió Exactas.


El derrumbe de los "sojeros" es otra expresión, por lo tanto, de una tendencia a la izquierda.


Antes de su derrota electoral ya habían sido derrotados en todos los acontecimientos políticos importantes del movimiento estudiantil. Prácticamente no hubo una sola asamblea o congreso estudiantil que no haya repudiado su posición en favor del capital agrario. A esto se le debe agregar, sobre todo en el caso del MST, que esta posición se combinó con el apoyo a los decanos ‘progres', que para colmo son kichneristas.


La pelea con la Franja y la impasse K


Las elecciones, de todos modos, devolvieron protagonismo a la Franja en virtud de la participación de Ciencias Económicas, que se encontraba alejada de la Fuba. Esta participación cambia sustancialmente el esquema de delegados (es la facultad con mayor representación) al congreso de la Federación, y le da a la derecha una palanca política (aunque incluso en Económicas ha habido un desplazamiento a la izquierda a partir del voto masivo que recibió la oposición de izquierda a Franja - MxE). En ausencia de un avance hacia la izquierda en el conjunto de la Universidad, la victoria de Franja en Económicas le habría dado un pasaporte a la dirección de la Fuba. De todos modos, a pesar de los enormes recursos disponibles y del apoyo directo de la gestión de la facultad, la Franja Morada, que se ocultó detrás de la máscara de Nuevo Espacio, hizo una elección por debajo de sus expectativas, pues no logró superar el 40% (MxE obtuvo más de la mitad, el 22%). El resultado fue vivido como un triunfo por la izquierda y como un velorio por Franja.


Franja Morada intentará ahora reunir en un frente a todas sus vertientes, la mayoría de las cuales sufrieron en estas elecciones sendos retrocesos electorales (Medicina, Farmacia, Psicología y otras), aunque la suma de esos votos no le alcanzará para recuperar la Fuba (tampoco puede contar con los votos de derecha, tipo Carrió, que desapareció de la UBA). El rector Hallú, convertido en el padre del "operativo retorno" u "operativo anti-PO", busca presionar a todas las variantes K, que en general vienen muy golpeadas por resultados electorales adversos, a armar una lista común con la Franja. Pero, para los K, ese paso podría ser su acta de defunción, aunque un frente de la totalidad de las tendencias de la Franja y los K no puede descartarse por completo. Aun en ese caso es incierto que tengan los votos necesarios para quedarse con la dirección de la Fuba.


El problema está en la izquierda


O sea que Franja Morada y los K necesitan que un sector de la izquierda les facilite la tarea. La posibilidad de semejante entuerto derechista existe, como lo demuestran señalamientos tales como "el modelo de la Fuba del PO está agotado" (MST) o "el PO debe abandonar su sectarismo" (Mella). Se trata de eufemismos para justificar un frente con la derecha o una parte de ella. Esto es lo que tiene presente el cronista de Clarín cuando se empeña en negar la mayor izquierdización del estudiantado y cuando advierte que Franja irá por la dirección. Que la izquierda sojera y algún sector de los ‘independientes' se puedan prestar a semejante contubernio, simplemente prueba que la crisis del capitalismo empuja a los democratizantes hacia la derecha (en especial a los que, como la izquierda sojera, están en plena descomposición).


Los resultados electorales exigen que la dirección de la Fuba continúe teniendo un carácter de izquierda, respetando el peso específico de cada agrupación de acuerdo con los delegados electos. Cualquier otra cosa denunciaría un giro hacia la derecha, que violentaría la voluntad política expresada en el voto. La plataforma programática de un frente no debería entrañar mayores problemas, porque tendría por eje la lucha por el mejoramiento material y político de la Universidad y sus estudiantes y docentes, y la lucha contra el régimen de camarillas, que buscan convertir a la UBA en un apéndice de los monopolios capitalistas. La crisis mundial añade mayores razones para este programa, pues ya no corresponde esperar ninguna ‘salida' financiada por capitales privados. Es muy sencillo: por una dirección de la Fuba independiente de la clase capitalista internacional o nacional, que impulse la colaboración política con la juventud trabajadora y los luchadores obreros y sus organizaciones.


Gabriel Solano

LA CORTE AGITA LAS AGUAS



Pero la libertad y democracia sindicales se arrancan con la lucha


El fallo de la Corte Suprema, que habilita la elección de delegados con independencia de que respondan o no a un sindicato con personería gremial, ha generado en todos los gremios una viva discusión, no solamente en los círculos de la burocracia sindical. El dictamen -una respuesta a un reclamo de la CTA- ha sido acogido por ésta con manifiesta complacencia. Sin embargo, cuatro días después del fallo, la Junta Electoral de ATE, un sindicato de la CTA, impugnaba la Lista Naranja-Marrón-Blanca en el Garrahan por "falta de antigüedad en la afiliación de dos compañeros", o sea que la burocracia de la CTA aplaude la libertad sindical solamente hacia fuera. Al final, la lista cuestionada fue oficializada, pero solamente una vez que fueron reemplazados los compañeros ‘cuestionados'.


El fallo declara la inconstitucionalidad del artículo 41 de la Ley de Asociaciones Profesionales, el cual exige un año de afiliación a una organización con personería gremial a cualquier candidato a delegado sindical. La Corte caracteriza a esta exigencia como "un monopolio (que) viola el derecho a la libertad de agremiación de los trabajadores, amparado por la Constitución Nacional". Las personerías gremiales son otorgadas por el Estado a través del Ministerio de Trabajo, o sea que sufren un condicionamiento político muy claro.


Pero su alcance es mayor, porque en sus fundamentos cita la diversidad de sindicatos actuantes en el Estado como antecedente de la "libertad sindical" que establecen los acuerdos de la OIT y el artículo 14 bis de la Constitución Argentina. El fallo, de todos modos, excede bastante la demanda presentada por ATE, que se limitaba a pedir para sí una igualdad de derechos con UPCN, Sutecba y otros sindicatos para elegir delegados en Pecifa (Personal Civil de las Fuerzas Armadas). Horacio Meghira, abogado de la CTA, tuvo que admitir que "el fallo nos corrió por izquierda" (Clarín, 12/11) por la simple razón de que facilita la elección de delegados sin otro límite que la pertenencia a una organización sindical simplemente inscripta. La CTA fue por la aplicación de la "pluralidad sindical" en el ámbito de la administración pública y salió con un fallo que impugna el monopolio legal de la burocracia de sindicatos en los lugares de trabajo.


Con todo, la nulidad del artículo 14 solamente se aplica al caso en litigio; será necesaria una ley para normar este nuevo derecho. Como ya ocurriera con la movilidad jubilatoria, los legisladores aprovecharán la ocasión para distorsionar la resolución judicial con diversas clases de condicionamientos. El fallo no afecta el derecho del cual goza hoy el sindicato con personería gremial y mayor número de afiliados para firmar los convenios de trabajo. Pero, indudablemente, al proteger el derecho a la elección de delegados otorga un espacio de libertad sindical para promover alternativas a la burocracia dominante. Este aspecto del fallo es visto con malos ojos tanto por la burocracia de Moyano como por la de Yasky y De Gennaro.


Es claro que la repercusión política del fallo no emerge solamente de la letra del dictamen; está relacionada con la inmensa crisis de la burocracia sindical de una y otra central, que es desafiada constantemente por los activistas y los trabajadores cada vez que existe un conflicto -como ocurrió recientemente en la lucha del Casino, por ejemplo, en manos de un burócrata derechista, o en la del neumático, en manos de la burocracia de CTA. La patronal ve un peligro mayor en otro terreno: como solamente el 12% de las empresas tiene organización sindical interna, la libertad para elegir delegados con su debido fuero sindical podría desatar una ola de sindicalización al margen de las burocracias cómplices de las patronales (por lo pronto hay 1.700 organizaciones simplemente inscriptas en el Ministerio esperando pista, lo cual es mucho aunque varias de ellas sean simples trámites sin ningún movimiento real detrás). Por otro lado, el fallo obliga al gobierno a zanjar la disputa entre la CTA y la CGT, que se arrastra desde hace casi dos décadas, y en la que el gobierno no ha podido intervenir porque ha logrado cooptar a las dos burocracias a su política de ‘reconstrucción de la burguesía nacional'. Ahora, el matrimonio deberá formar una mesa de tres para arbitrar un arreglo que deje afuera, claro, al activismo clasista o antiburocrático.
El proceso político desencadenado por el fallo pinta a la burocracia sindical de las dos centrales, ambas comprometidas con el gobierno capitalista de Kirchner. La CGT, tras el brote inicial en el que acusó a la Corte de ser "funcional a la izquierda de la Cuarta Internacional" (Belén, UOM), pide una ley para neutralizar el fallo; la CTA prefiere seguir pidiendo su propia personería gremial para no lanzar una campaña por la elección de delegados independientes de la burocracia en todos los lugares de trabajo. El otorgamiento de personería a la CTA no es lo mismo que la libertad sindical; sólo extiende el monopolio sindical a otra burocracia firmemente establecida. En esta variante, los activistas que quisieran aprovechar la brecha de la libertad sindical para implantarse en los lugares de trabajo con una protección contra el despido, deberán pelear contra dos burocracias establecidas e integradas al Estado. En los sindicatos de ambas centrales, las elecciones de delegados en los lugares de trabajo son manipuladas por las burocracias dirigentes.La alarma que el fallo despertó en la patronal es instructiva. Para algunos empresarios es "un fallo acertado para un país equivocado" (Clarín, 16/10), es decir que derivaría en una guerra de aparatos sindicales en las empresas, algo que en Europa, por ejemplo, está regido por ‘un acuerdo de caballeros'. De Mendiguren, de la UIA, advierte sobre la posible "caja de Pandora" que pudiera alterar "las relaciones ya armadas con dirigentes sindicales conocidos". Saben, de todos modos, que el tema será reglado por una ley que arbitrará los intereses de las burocracias sindicales y reforzará los controles para que no sirvan a la organización independiente de los activistas.


Mucha agua pasará bajo el puente hasta que se vean las consecuencias prácticas de este fallo, más allá de los involucrados en la propia sentencia.
Hay sectores de los trabajadores que ven en el fallo una posibilidad de desarrollo: desde los docentes autoconvocados de Salta -que han roto con la burocracia de Ctera-, hasta los obreros del subte que sufren el acoso de las patotas de la UTA, pasando por los docentes de AGD-UBA que enfrentan un sello vacío (Aduba) con mayoría trucha de afiliados y personería gremial, y por los trabajadores de los ‘call center', que la burocracia de Foetra ha entregado indemnes a las patronales o que han sido forzados a encuadrarse en el sindicato de Cavalieri. Pero está claro que no es el fallo, sino la claridad de la orientación política y el desarrollo de la capacidad de lucha lo que permitirá que se impongan como representación real de los trabajadores ante la patronal y el Estado.


Si el 88% de los trabajadores no tiene representación de empresa, como en algún momento lo estableció una investigación del Ministerio publicitada por la CTA, es hora de una campaña de organización y elección de representantes para enfrentar la ola de despidos y suspensiones. La crisis exige actuar ahora y no será la expectativa de una ley, forzosamente trucha, la que vaya a dilatar los desafíos y las respuestas. Sobre la base de un plan de lucha contra las suspensiones y despidos, por el reparto de horas de trabajo sin afectar el salario y por un aumento salarial inmediato; sobre la base de esta lucha conseguiremos los delegados, la representación y la organización que llevará a la victoria nuestras reivindicaciones.


Néstor Pitrola

jueves, 13 de noviembre de 2008

LOS NACIONALES TOCAN "FONDO (Monetario)"



Hay una salida para la crisis cada vez más grave del capitalismo


En la mañana del lunes 10, los Kirchner esperaban iniciar una semana "tranquila" en los "mercados". Pero en ese momento, una densa columna de trabajadores mecánicos irrumpía en el centro financiero de la Ciudad.


La marcha del Smata colocaba en el centro de la crisis a una clase obrera sacudida por suspensiones, despidos, vacaciones anticipadas y reducciones salariales en todos los gremios. Según las "estadísticas" oficiales, los obreros afectados por la crisis no suman más de 20.000. Pero otras estimaciones colocan esa nómina entre 80.000 y 200.000 trabajadores. Los voceros oficiales, al igual que los Moyano o José Rodríguez, aseguran que "no se producirán despidos".

Cuando dicen eso, ni consideran a los miles de contratados o tercerizados que ya han sido cesanteados. Pero preparan el camino de las cesantías, desde las vacaciones adelantadas hasta la supresión de turnos. Según el diputado cegetista Héctor Recalde, con la oleada de despidos la patronal "busca obtener ventajas sectoriales como, por ejemplo, beneficios impositivos" (La Nación, 9/11). La burocracia sindical, asesorada precisamente por Recalde, está gestionando que las patronales no paguen los aportes previsionales u otros impuestos. Estas patronales han fugado otros 4.700 millones de dólares sólo en octubre.


¿"Reactivación" o fraude?


La impotencia de la burocracia frente a la crisis sólo se parangona con la del gobierno que defiende. De cara al derrumbe económico, los Kirchner prometen una reactivación de la mano de la Anses, luego de la estatización de los recursos jubilatorios. Pero más de la mitad de los 5.000 millones de dólares de los aportes que se recaudarán en 2009 aportarán al sostenimiento de la deuda pública; o sea, el mismo destino que tenían esos recursos cuando estaban en manos de las AFJP. Así quedó establecido, por otra parte, en el proyecto oficial que los "K" consensuaron con Lozano y Macaluse. En definitiva, el gobierno solamente posa de "reactivador"; los planes de "obra pública" pomposamente anunciados para 2009 son "lo mismo que figura en el Presupuesto del año próximo" (Clarín, 11/11). En ese caso, la disponibilidad de fondos que brinda la caja del Anses servirá "más que para incrementar la cantidad de obras, (para) reducir la demora en los pagos" (ídem). O sea que no hay un nuevo plan de obras, sino solamente un régimen de pronto pago para los Macri, Roggio y toda la "patria contratista". Para obtener fondos adicionales para obras, el gobierno plantearía reducciones en los subsidios tarifarios. Pero eso significa nuevos aumentos de tarifas, con la consiguiente reducción del consumo popular.


Algo parecido ocurre con los fondos previsionales que financian préstamos al consumo. La Anses, la "usina de la reactivación", acaba de prestarle a Frávega unos 30 millones de pesos, a la "módica" tasa de interés del ¡29% anual!, en la línea de la suba de rendimientos bancarios que el gobierno dispuso para frenar la corrida cambiaria. Más que nunca, los créditos al consumo constituirán una hipoteca usuraria sobre aquellos que los contraigan.El plan kirchnerista para "reactivar la economía" es, sencillamente, un fraude.

Morir en el Fondo


Aun echando mano a los aportes de 2009 y refinanciando la deuda ya contraída con la Anses, al gobierno le restarían unos 4.000 millones de dólares para cumplir con los usureros, o sea en el mejor de los casos. Frente a este cuadro, los "nacionales y populares" ya han pedido la toalla: al Fondo Monetario Internacional. En la reunión de ministros del Grupo 20, en Brasil, el ministro Carlos Fernández pidió que "las instituciones financieras internacionales (o sea el FMI) provean instrumentos de liquidez de corto plazo" a los países "en dificultades" (Ambito, 10/11). En Washington, la Presidenta tendrá la oportunidad de colocar a la Argentina en la cola de países que pidan algún crédito al FMI. Los que el Fondo acaba de otorgar a Hungría y a Ucrania están atados a pesados ajustes presupuestarios. De todos modos, luego de la estatización de las AFJP, los Kirchner tendrán que hacer el ajuste en seco, sin liquidez desde afuera. El interés que hubiera podido tener el Fondo (salvar a los capitales españoles en América Latina) no incluye a la Argentina. Lo que surge de aquí es claro: está en marcha una gran crisis con el capital internacional, que sólo puede ser resuelta positivamente con la nacionalización sin indemnizacion de la banca y el repudio definitivo de la deuda externa.


Una salida obrera


Los Kirchner creen que podrán capear la crisis con el envío de inspectores al mercado de cambios, incluso cuando China acaba de reconocer su proprio hundimiento con un paquete de rescate de 600.000 millones de dolares, el tercio de su PBI; o sea, el mayor rescate de la historia de la humanidad. Pretenden recibir de regalo el rescate armado por la Reserva Federal para Brasil, como si 50.000 millones de dólares en una operación de canje de corto plazo de reales por dólares alcanzaran para detener el desplome de nuestro vecino. Los Kirchner tienen una caracterización muy limitada de la crisis mundial y han llegado demasiado tarde para neutralizarla.
Con la escalada de despidos, suspensiones y ataques al salario, la clase obrera es empujada a irrumpir en el escenario de la crisis, como ya ocurre en otros países (Italia, España, Alemania). La descomposición económica, por otra parte, golpea desde hace rato a los trabajadores. Una encuesta privada acaba de revelar que el número de pobres ya llega a 11,5 millones de argentinos, "la misma cantidad que en la crisis de 2001" (La Nación, 9/11).

La burocracia sindical (CGT y CTA) oficia de lobbysta de los vaciadores del país: Pero hay una salida popular para la crisis.


1. Prohibición inmediata de suspensiones y despidos.

2. Reparto de las horas de trabajo sin afectar los salarios.

3. Cese del pago de la deuda externa.

4. Constitución de un gran fondo de capital para impulsar las obras de infraestructura y de industrialización bajo control obrero.

5. 82% móvil para los jubilados, dirección de la Anses por obreros y jubilados.

6. Salario mínimo igual al costo de la canasta familiar.

7. Por un congreso de trabajadores para ofrecer un programa económico y político de salida al derrumbe capitalista.

Marcelo Ramal

miércoles, 12 de noviembre de 2008

07/07/2008 PLAZA DE MAYO

Brutal represion del gobierno K al POLO OBRERO y otras agrupaciones, en el marco del conflicto del campo. Primera parte.

PLAZA DE MAYO 07/07/2008

Brutal represion del gobierno K al POLO OBRERO y otras agrupaciones, en el marco del conflicto del campo.

lunes, 10 de noviembre de 2008

UN "RESPIRO" MUY COSTOSO



En la mañana del miércoles 5, el gobierno parecía sortear el "golpe de mercado" y la crisis desatada por la estatización de las AFJP. Además de un descenso de la cotización del dólar, decía contar con los votos necesarios para aprobar la reforma previsional entre los diputados parecían garantizados.

"Golpe de mercado"

Sólo los ingenuos pueden creer que el gobierno frenó la escalada del dólar apelando al gurka Moreno; o sea, a un supuesto control de cambios como lo es limitar la venta de divisas a importadores o requerir que los especuladores retengan durante tres días la triangulación de la compra-venta de acciones con los mercados del exterior. Mientras esperaban que la tendencia a una revaluación del peso apresurara la venta de dólares de los exportadores, consiguieron lo contrario: los pulpos cerealeros no liquidan divisas, ni están dispuestos a hacerlo por ahora.

La pretensión de que los controles oficiales apuntan a defender la moneda no la cree ni el gobierno mismo. "Pará de comprar por quince días, hasta que se apruebe lo de las AFJP" (Crítica, 5/11), le dijo Moreno a un operador cambiario. La patronal agraria, industrial y el gobierno (por razones de caja) propician una devaluación mayor. Para frenar la corrida cambiaria y la fuga de depósitos, el gobierno promovió una suba astronómica de las tasas de interés, que agrava la recesión económica.

El escenario del Congreso

En la noche del domingo, Carrió llamó por televisión a repetir este miércoles "la gran marcha de Palermo". Horas después, la movilización languidecía, en medio de las deserciones de la UCR, una fracción de la Federación Agraria y, finalmente, por los propios disensos entre Macri y Carrió.


Anteriormente, habían naufragado las tentativas de "cacerolazos" supuestamente "autoconvocados". Ni ellos, ni las AFJPs, pudieron presentar una alternativa a la estatización, que se impuso como consecuencia de la necesidad de hacer frente a la cesación de pagos de la deuda externa. El planteo alternativo de una "libre opción permanente entre reparto y capitalización" - esbozado por parte de la oposición y la cámara de las AFJPs- , sólo lograría desatar un éxodo al sistema estatal.

La división patronal responde, de todos modos, al impacto desigual que tiene la crisis entre los sectores capitalistas. Mientras unos (Buzzi) reclaman subsidios estatales, los otros (De Angeli, la CRA o la Rural) esperan que la crisis agraria provoque una mayor concentración de tierra y de capital en el campo. Hasta hace pocas semanas, todos ellos llamaban a "no desaprovechar las oportunidades que nos brinda ‘el mundo'". Ahora necesitan protegerse de él.La versión definitiva del proyecto oficial "especifica" el destino que se le dará a los aportes al sistema estatal, el cual será el mismo que les daba la administración privada: la mitad seguirá destinada a refinanciar la deuda pública y el resto a la compra de acciones, obra pública y "fondeo" de créditos al consumo.


La comisión de "monitoreo" de la Anses, que exigieron el SI y Lozano, estará formada por representantes del gobierno, de la UIA y de los bancos. A los centroizquierdistas ni se les ocurrió reclamar la suba de las jubilaciones o el 82% móvil. El administrador de la Anses, Amado Boudou, anunció la posibilidad de acuerdos para financiar a desarrolladores inmobiliarios y empresas de electrodomésticos. El gobierno se ha visto obligado a producir un cambio para dejar todo como está.

Los "peajes" que vienen

Con todo, no bastará este "status quo" para calmar a los "mercados". Morales Solá, golpista inveterado, advierte todavía sobre "los resultados del Senado" (La Nación, 3/11).
A la tregua cambiaria contribuyó indirectamente la Reserva Federal norteamericana al concederle un préstamo reversible de 30.000 millones de dólares a Brasil, "lo que refuerza la política de revalorización del real, que ahora y presumiblemente podría aflojar la presión por un ajuste mayor del peso argentino" (Clarín, 5/11). Luego de denostar al FMI, los Lula y los Kirchner se agarran al socorro de los yanquis.

El embargo judicial de los fondos de las AFJP depositados en Estados Unidos también parece controlado, si es cierto que "el litigio se resuelve con una nueva propuesta de pago a los bonistas" (Crítica, 5/11). El gobierno también tendrá que vérselas con la crisis de Aerolíneas, pero los Kirchner ya desmintieron ante Zapatero la intención de estatizar la compañía, es decir que preparan un compromiso con los vaciadores. En este cuadro, De Vido inició la reducción de subsidios a tarifas eléctricas, otra señal de ajuste en favor de los privatizadores.
La votación de los senadores está sujeta al pago de estos y otros "peajes"; los diputados de Cobos ya anticiparon su rechazo a la estatización de las AFJP. El kirchnerismo ya sabe, por lo tanto, qué puede esperar de un hipotético empate en el Senado.

Desintegración económica

Los límites de las maniobras oficiales se ponen de relieve en la parálisis económica que avanza implacablemente. Las suspensiones y despidos arrecian en la industria automotriz y en sus proveedores, en la industria de la construcción y, en general, en todas las actividades que dependen del crédito al consumo. La gran patronal bancaria dispuso miles de despidos de trabajadores contratados. En Salta y en la Patagonia, los Estados que viven de las regalías petroleras enfrentan una crisis fiscal. El derrumbe mundial del mercado cerealero sacude también a los distritos agrarios y a las industrias ligadas. Moyano admitió la impotencia oficial para detener la oleada de despidos.

Los "nacionales y populares" creen que pilotean la catástrofe capitalista. Lo único que están haciendo es izar un barrilete en medio de la tormenta.
Para frenar la sangría nacional se necesita un programa obrero y socialista:


1. Defender la estatización de las jubilaciones mediante la inmediata intervención de las AFJP, su nacionalización, el control obrero de los fondos de la Anses y la restauración del aporte patronal.

2. Asegurar el inmediato 82% móvil para los jubilados y un salario mínimo igual a la canasta familiar.

3. Nacionalizar la banca y el comercio exterior bajo control obrero.

4. Cesar el pago de la deuda externa.

5. Prohibir las suspensiones y despidos, reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario, reapertura inmediata de las paritarias.Exijamos a la CGT y a la CTA que rompan con el gobierno y que convoquen a un congreso de trabajadores para debatir y resolver un plan de lucha frente al derrumbe capitalista y la impotencia oficial.

Marcelo Ramal

jueves, 23 de octubre de 2008

HISTORIA DE LA FUBA




Cortometraje documental sobre la Federacion Universitaria de Buenos Aires y en homenaje al 80 aniversario del nacimiento de Ernesto Che Guevara. Simbolo, figura e inspiracion de la juventud argentina y del mundo en su lucha por la educacion publica y contra la opresion capitalista. Relaizacion: Ojo Obrero

Los últimos cartuchos del matrimonio Kirchner


Por la nacionalización de los bancos sin indemnización

La bancarrota capitalista mundial abrió una brecha que ha permitido filtrar una reivindicación histórica de los trabajadores: la liquidación del sistema de jubilación privada. El matrimonio Kirchner y sus secuaces, que fueron promotores activos de la privatización de la previsión social que llevaron adelante Menem y Cavallo, se han visto obligados a estatizar las AFJP para sortear una cesación de pagos inminente de la deuda pública. Los 15.000 millones de pesos que ingresan por año a las AFJP servirán ahora para aportar al pago de los vencimientos de la deuda hasta fines de 2009, que se estiman en 20.000 millones de dólares. Los intentos de obtener esa financiación por medio de una renegociación de los títulos que vencen a corto plazo, con el auxilio del Citibank, el Deutsche Bank y el Barclays, habían fracasado en forma rotunda como consecuencia de la crisis financiera internacional. Asimismo, esta estatización de la jubilación privada transfiere al Estado más de 15.000 millones de dólares en títulos de la deuda pública que se encontraban en poder de las AFJP, lo cual elimina la necesidad de hacer frente a su pago, en especial, el de la porción que vence a corto plazo. En una palabra, la estatización de las AFJP es, antes que nada, un operativo financiero para evitar una nueva cesación de pagos y hacer posible la continuidad del pago de la deuda pública. Se trata, por lo tanto, de una operación de rescate, antes que nada, de los acreedores internacionales y del sistema financiero internacional. A cambio de esto, claro, el Estado asume la responsabilidad por el pago de las jubilaciones de otros cuatro millones de trabajadores. Ese compromiso es "implícito", porque no aparece registrado en ninguna de las cuentas oficiales. La estatización penaliza a los bancos que lucraban con la jubilación privada (el español BBVA o el holandés ING), pero apunta a darle aire al conjunto del sistema bancario y en especial a los amigos del oficialismo: el Banco Macro o el grupo Eskenazi y otros bancos extranjeros con sucursales en Argentina.

Derrumbe de la jubilación privada

La estatización de la jubilación privada era igualmente obligatoria, porque las condiciones para cumplir los compromisos con los afiliados de las AFJP se estaban deteriorando a toda velocidad. El dinero de los contribuyentes de las AFJP se encontraba invertido en títulos de deuda pública y en acciones que han perdido el 70% de su valor como resultado de los derrumbes de la Bolsa y del mercado de capitales en general. Como consecuencia de esto, también se habían desvalorizado fuertemente las cuentas individuales de los afiliados, en especial las de aquellos que debían jubilarse a corto plazo. Debido a esto, el gobierno autorizó a las AFJP a contabilizar sus inversiones al valor histórico, no a su precio de mercado. De esta manera se evitaba perjudicar las cuentas personales y, en particular, las de aquellos que tramitaban su jubilación. Pero como las AFJP no podían pagar estas jubilaciones con la venta de los títulos y acciones en su poder, el dinero debía salir, no de la cuenta de los que se jubilan, sino de los aportes de los trabajadores en actividad. Se había creado entonces una situación de vaciamiento de las AFJP, que debían pagar los retiros como si fueran un sistema de reparto, no de capitalización. Este vaciamiento no había tenido la oportunidad de manifestarse en las crisis de 1995 y de 2001, debido a que por esas fechas no se producían todavía retiros. Asimismo, como los pronósticos sobre la crisis actual -incluso los más optimistas-, prevén que no habrá una recuperación financiera internacional ni siquiera a mediano plazo, la bancarrota de las AFJP estaba sellada si se pretendía seguir pagando los retiros de acuerdo con el acumulado en cuentas individuales, infladas por no registrar el derrumbe de la cotización de las inversiones. Incluso antes de la crisis, los afiliados de las AFJP no cobraban jubilaciones por más del 30/40 por ciento del sueldo en actividad, además de los millones de afiliados que no podían completar el período de cotización debido a años de desempleo o de trabajo en negro.


La liquidación de la jubilación privada es un hecho histórico progresivo, por el cual hemos luchado infatigablemente desde antes incluso de que se concretara la privatización. El 99% del oficialismo actual, en cambio - y en especial la burocracia sindical- , se jugaron con todo por la privatización menemo-cavallista; se formaron numerosas AFJPs con la participación de la burocracia, que ofrecía a los afiliados de los sindicatos como clientela cautiva para sus administradoras. Aún hoy funciona Previsol, una AFJP del ‘solidario' Heller, del banco Credicoop, en conjunto con la burocracia kirchnerista del Suterh. Es claro que el matrimonio oficial no buscó nunca la estatización, ni menos fue nunca, para él, una reivindicación oficial; ha sido impuesta por la bancarrota capitalista mundial: sacrifica a una fracción menor del capital financiero para poder hacer frente a un nuevo colapso de la deuda pública. Se ha venido abajo un pilar de la estrategia kirchnerista para ‘reconstruir a la burguesía nacional': nos referimos al desarrollo de "un mercado de capitales en pesos", el cual acaba de ser enterrado solemnemente con la estatización de las AFJP.

Los límites de la estatización capitalista

Llegado a este punto, es necesario decir que -en el marco de la privatización jubilatoria- no existe una diferencia de principio entre el sistema privado y el estatal de previsión. De un lado, el Estado ha debido complementar una parte de la jubilación privada con aportes propios. Del otro, la privatización solamente podía ser viable si la remuneración que ofrecía la jubilación privada funcionaba como un techo para todo el sistema jubilatorio; o sea que la jubilación estatal no podía ofrecer nunca una jubilación superior al 35% en promedio. La estatización que acaba de consumar el kirchnerismo no devuelve el 82% móvil y las remuneraciones siguen la pauta impuesta por la privatización. Por otro lado, el gobierno ha invertido el aporte previsional de los trabajadores en la misma línea de las AFJP: títulos públicos y acciones. El Fondo de Sustentabilidad de la Anses parece ‘sustentable' porque cotiza las letras y títulos públicos a la par, no a precios de mercado. El Estado capitalista es incapaz de utilizar el enorme fondo de aportes obreros de un modo diferente al que lo hace la propia clase capitalista. Para que ocurra lo contrario es necesaria otra clase de Estado y, por de pronto, que la Anses sea gestionada por representantes de obreros y jubilados electos, en función de las prioridades que debería establecer un congreso nacional de trabajadores. Otra similitud entre el régimen privado y el público es la abolición completa o parcial de los aportes patronales. Si se tiene en cuenta que la jubilación forma parte del salario de los trabajadores, la falta de aportes patronales significa que la jubilación se obtiene mediante la amputación del salario (un porcentaje del salario financia jubilaciones misérrimas), o sea que hay una confiscación en beneficio del capital.

Las conclusiones

Para que la estatización previsional sea real es necesario, entonces: 1) restaurar el aporte patronal; 2) establecer el 82% móvil; 3) que la Anses no sea manipulada por el gobierno sino que sea dirigida por representantes electos de trabajadores y jubilados; 4) que la inversión de los fondos acumulados sea establecida por un congreso de trabajadores.

La pregunta del millón es ahora la siguiente: ¿la absorción de los ingresos de las AFJP -y la recuperación de la deuda del Estado en manos de ellas- resuelve la inminencia de la cesación de pagos que pretende resolver?

De ninguna manera. Incluso con la amputación que ha sufrido la deuda pública, la fuga de capitales es incesante, esto como consecuencia de la crisis financiera mundial, que es más intensa que nunca. La salida de dólares no para, el fenómeno es general en los llamados ‘países emergentes'. Argentina ha sufrido una sangría de 23.000 millones de dólares en poco más de un año. Por otro lado, hay una manifiesta caída de los precios de exportación. Como la estatización de las AFJP ha sembrado el temor en el capitalismo mundial de que otros países puedan hacer lo mismo, esto porque la bancarrota del sistema privado es internacional, la tendencia a la fuga de capitales se habrá de acentuar. Argentina está afectada por una presión devaluatoria del peso, que tiene alcance internacional como lo demuestra la desvalorización que sufren México, Turquía, Brasil, Rusia, Corea del Sur, Hungría, Letonia - e incluso la Unión Europea y en especial Gran Bretaña. Además, la jornada del miércoles dejó en claro que hay en marcha un ‘golpe de mercado' contra la estatización de las AFJP. La estatización debe ir más allá: se impone nacionalizar los bancos sin indemnización; establecer un control obrero de los bancos estatales; nacionalizar el comercio exterior y poner un control de cambios; prohibir suspensiones y despidos; repartir las horas de trabajo sin afectar los salarios.

Se ha abierto en Argentina una perspectiva de agudización de la crisis política: el equilibrio precario que dejó el conflicto por las retenciones de la soja se ha vuelto a quebrar aún más decisivamente. Asistimos al fenómeno de un gobierno capitalista que toma una medida parcial de amputación de un gran negocio capitalista, forzado por una crisis mundial gigantesca. Es necesario ver ambos lados de la crisis en forma unificada: un choque de un gobierno patronal con una fracción del capital, como un intento para evitar una quiebra de conjunto del régimen capitalista. "La idea de usar los fondos de la seguridad social para evitar la cesación de pagos (o para pagar la deuda) el próximo año -dice el blog RGE que dirige el afamado Nouriel Roubini- debería causar un aguda caída de la confianza en el país y en su gobierno". Aquí hay un medio anuncio de que en el exterior le han bajado el pulgar al oficialismo. Hagamos notar que la crítica a la intervención del gobierno en las AFJP parte de uno de los partidarios de un rescate ‘progresista' del sistema capitalista internacional.
Una campaña por un programa de medidas urgentes y transitorias como las señaladas debe apuntar a desarrollar las alternativas estratégicas al régimen capitalista, en primer lugar un reagrupamiento obrero independiente que impulse el objetivo de la unidad socialista de América Latina.

Jorge Altamira

lunes, 31 de marzo de 2008

LA SALIDA ES OBRERA Y SOCIALISTA

ANTE LA CRISIS COMPLETA DEL REGIMEN

Cristina Kirchner ha logrado con su discurso del martes lo que solamente De la Rúa había conseguido antes de ella: suscitar una rebelión popular.

La Presidenta ataca el paro de los grandes pulpos y pequeños y medianos productores agropecuarios desde la ‘caja' de De Vido, los fondos de Santa Cruz, la reprivatización de YPF y la creciente entrega del petróleo; desde los sobreprecios de Skanska, la 4x4 que Varizat tiró contra los docentes de su provincia y el pago de la deuda externa con la plata de la Anses; desde una inflación imparable, techos salariales y, por último, desde las patotas de la burocracia que ella ungió como sus aliadas, que van al ataque de los trabajadores que luchan, o desde los piquetruchos como D'Elía, que encubren las fechorías del oficialismo.

El paro agropecuario expresa el agotamiento definitivo de la política de devaluación monetaria, que según la misma Presidenta enriqueció a los grandes exportadores.

Pero no sólo a los agrarios, sino también a los automotrices, mineros, petroleros y siderúrgicos.

Y no sólo a ellos, sino a los punteros del oficialismo que manejan los subsidios del transporte, del gas, de la luz y de los grandes negociados de obras públicas.

Ahora estamos ante una lucha por el reparto de la renta económica entre diversos sectores capitalistas, cuyas consecuencias las paga el pueblo con carestía y superexplotación.

La Federación Agraria Argentina e incluso muchos chacareros autoconvocados han desvirtuado el carácter independiente de su lucha al aliarse con la Sociedad Rural y con los pulpos agrofinancieros, que serán los mayores beneficiarios de la reivindicación de suspender los aumentos de las retenciones a las exportaciones.

Los pulpos y los terratenientes tienen valuaciones fiscales irrisorias, que han conservado hasta el presente gracias a los Kirchner, los Scioli, los Schiaretti o los Binner.

La oligarquía está presente en los dos lados de la trinchera: los kirchneristas Cresud, Werthein, Urquía, Grobocopatel son grandes latifundistas y agroexportadores.

La Sociedad Rural y los grandes bancos sustentan, en América Latina, la ofensiva de Bush contra los procesos populares o de liberación nacional.

El componente popular de los cortes de ruta agrarios está desnaturalizado por la dirección política y los reclamos del movimiento: bajar las retenciones, que son los de la gran propiedad capitalista agraria.

El Partido Obrero destaca, en esta crisis, el derrumbe completo de la política económica oficial, que es también una expresión de la crisis capitalista mundial.

El gobierno kirchnerista acabará cediendo en toda la línea a las exigencias de los grandes intereses agrarios.

La salida a este derrumbe no pasa por tomar partido por cuál sector capitalista se queda con el fruto del trabajo de la clase obrera y de los productores independientes.

Pasa por impulsar la nacionalización de la gran propiedad agraria y su arrendamiento a los chacareros necesitados de tierra y al servicio del poblamiento agrario, o por la explotación pública directa por los obreros del campo.

Pasa por la nacionalización del comercio exterior y por sobre todo de los puertos privados (por donde los grandes pulpos contrabandean la exportación sin pagar retenciones), bajo control de productores y obreros, para asegurar que los beneficios de la producción sirvan a la industrialización agraria y a superar las grandes carencias sociales.

Ante la crisis abierta llamamos a los trabajadores a no permitir que la burocracia siga manejando las paritarias y a intervenir en ellas para imponer un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar y el fin de la flexibilización laboral.

Se ha abierto una crisis de largo alcance, económica, pero por sobre todo, política. El nacionalismo burgués concluye en un fracaso. El gobierno matrimonial está definitivamente hipotecado. Impulsemos una alternativa obrera y socialista.

miércoles, 23 de enero de 2008

Campamento de Verano de la UJS

DEL 15 AL 18 DE FEBRERO EN RAMALLO


La UJS está preparando un gran campamento. Una instancia de formación política de la juventud obrera y estudiantil, pero también una instancia social de esparcimiento y recreación, para compartir en el balneario en el río y tantas experiencias de lucha que se funden en la UJS.

Los campamentos son ya una tradición en la UJS y se están extendiendo al interior del país. Los campeonatos de fútbol, voley y truco, la fiesta del último día, el si lo sabe ladre... Lo más importante la clase práctica de socialismo, la propia organización del campamento. Todos los que participamos del campamento trabajamos para sostenerlo, nadie es mulo de nadie. Las comisiones que trabajan, son las que discuten los cursos que se dan, la experiencia de lucha en las escuelas y facultades, en los barrios y en las fábricas. Este año los cursos de formación son dos: el curso del Estado y la Revolución, y el curso sobre el 90 Aniversario de la Revolución Rusa.

Llegar a Ramallo es un esfuerzo militante. Las regionales están organizando fiestas y ventas de empanadas. Algunas se movilizan para reclamarle a los municipios los micros que han encarecido fuertemente la actividad

Es un campamento de luchadores. Todos tienen su lugar en el campamento a condición de que se organicen para ello. Nos vemos en el río, en Ramallo.

Freddy Gima

Se quebró otro intento de derrotar la huelga

Cambió el escenario, no la lucha

Se quebró otro intento de derrotar la huelga de los trabajadores del CasinoUna decisión aberrante del juez Oyarbide dio lugar a la apertura del Casino, clausurado el 9 de diciembre por la jueza Servini de Cubría. La resolución de Oyarbide fue un verdadero bando militar que amplió el radio de acción de la Prefectura para impedir el bloqueo de las instalaciones del Casino por parte de los huelguistas. La resolución establece un verdadero estado de sitio de la zona adyacente al puerto.

La apertura se produjo luego de que el Ministerio de Trabajo, que abiertamente saboteó la posibilidad de sentar a la patronal con los representantes de los trabajadores, hiciera lugar a un pedido conjunto de la burocracia de Aleara y la patronal para que se abriera el Casino y se "liberaran" las puertas de entrada por medio de la Prefectura.

Tanto la patronal como la burocracia (que sacó afiches al respecto), suponían que los luchadores del Casino instalados en la Plaza de Mayo habían quedado aislados del conjunto de los trabajadores. Actuaron con la expectativa de que una apertura con la "garantía" de la Prefectura produciría una "corrida" que desmantelaría la lucha.

Para sorpresa de unos y otros, los trabajadores del Casino se fueron de la Plaza de Mayo y convocaron a una memorable asamblea en el Parque Lezama con más de 400 trabajadores de Aleara, que votaron por unanimidad continuar la lucha hasta que la empresa se sentara a discutir con sus representantes el conflicto.

La patronal no conocía exactamente el pulso de la situación. Sí lo conocían los dirigentes de la huelga que, a través de su boletín de informaciones de la lucha, habían llegado casi al 80% del personal; sabían que aun los que no participan abiertamente del piquete apoyaban la lucha, pues saben que una vuelta al trabajo sin los delegados y sin los activistas transformaría al Casino en la misma cárcel que es el Hipódromo de Palermo (en el que también está Cristóbal López).

La patronal fracasó estrepitosamente en el intento de cambiar despidos por arreglos que dejara afuera sólo a los activistas. Hasta el día de hoy, sólo siete de los 97 despedidos aceptaron la indemnización. Se han producido algunos retiros voluntarios de sectores que no participaron de los piquetes y también entre los propios carneros, que no aguantan la presión del 90% de sus compañeros afuera luchando y un Casino semidesierto dominado por las patotas de Aleara y el Somu más la Prefectura. Aunque son despidos encubiertos, estos arreglos no le sirven a la patronal pues no afectan el corazón de su problema: que el activismo se mantiene firme en la lucha. A pesar de los dos meses, no han podido derrotarlo ni con patotas, ni con la Prefectura ni con las burocracias sindicales del Aleara y del Somu.

Batallas en las puertas
del Casino

Luego de la asamblea de Lezama, los compañeros marcharon, con las trabajadoras del Casino y las madres de los trabajadores al frente, ante las barbas mismas de la Prefectura, que dispuso un bloqueo con más de 700 efectivos para impedir que se reinstalara el piquete en las puertas del Casino. Los acompañaron decenas de activistas, delegados, comisiones internas y una fuerte columna de mas 400 compañeros del Partido Obrero.

A partir de allí se inició un bloqueo que impidió la llegada de las combis y los clientes, restaurando en el puerto el acampe de Plaza de Mayo. Cambió el escenario pero no la fuerza del conflicto. Oyarbide, la patronal y el Ministerio de Trabajo sufrieron una primera derrota. Al segundo día de acampe, mientras los trabajadores seguían armando su boletín de informaciones de la lucha, recibían muestras de solidaridad de los vecinos de la costanera Sur y de la inmensa cantidad de camioneros que pasan por el puerto. Ese día realizaron un festival y comenzaban a llegar delegaciones obreras en apoyo a la lucha.

La patronal, a escondidas, comenzó a hacer entrar a los carneros por el barrio de la Boca a través de un catamarán que atravesaba las fétidas aguas del Riachuelo con más policías que trabajadores y clientes. Al salir a la luz la maniobra, una delegación de madres de Casino realizó un valiente piquete en el embarcadero denunciando ante todos los medios a la patota de Aleara y a la Prefectura. Lo que produjo otra derrota, esta vez en el pintoresco "Caminito". No caminó más el Catamarán de carneros y clientes.

Cerrada la entrada por la Boca y con las entradas bloqueadas en las adyacencias del Casino, no llegaban clientes y había muy poco personal. Entonces se puso de manifiesto crudamente todo el poder del Estado a favor de la patronal amiga de Kirchner. La Prefectura, sin mostrar ninguna orden, avanzó violentamente sobre el piquete pateando todos los enseres del acampe y a palos expulsó a los trabajadores hasta la calle Madero, donde termina su "jurisdicción represiva". A los 15 minutos llegó el "apoyo" de la Federal que, también sin orden alguna, fue haciendo retroceder a los trabajadores del Casino, también a palos y empujones, hasta las escalinatas de la Facultad de Ingeniería. La Federal detuvo a un trabajador.

Si López, la Federal y la Prefectura creían que el desalojo era el fin de la huelga volvieron a equivocarse. Los delegados convocaron una nueva asamblea a las seis de la tarde en las escalinatas de Ingeniería. Volvieron a concurrir 400 trabajadores del Casino. En asamblea, rodeados de la solidaridad de la izquierda y de fábricas movilizadas como Parmalat, decidieron volver a la puerta del Casino. Casi 1.500 compañeros recorrieron otra vez el camino hacia las puertas del Casino y volvieron a reinstalar el piquete ante el asombro de los más de 300 infantes de la Prefectura y los gerentes de la empresa que creían que habían triunfado en el "operativo desalojo".

Una vez en el lugar, volvieron los bloqueos que debilitaron el ingreso de clientes. El martes 15, otra multitudinaria movilización de solidaridad de más de 2.000 compañeros vino en apoyo del piquete fortaleciendo el ánimo de estos grandes luchadores.

Luchamos para ganar

La huelga del Casino ya lleva más de 60 días. Sólo con leer la crónica de los últimos acontecimientos se aprecia que empieza a entrar en la historia de las grandes luchas obreras. Los trabajadores han sorteado enormes obstáculos. La lucha ha templado una dirección joven que ha realizado un curso acelerado de cómo funciona el Estado al servicio de las patronales. Están enfrentando al frente unido de patotas del Somu, de Aleara y del Turf, a la Prefectura, a la Federal, la complicidad de jueces laborales, civiles y penales y a un Ministerio de Trabajo al Servicio de Cristóbal López, que nunca quiso sentarse a discutir.

La juventud trabajadora es la emergente obrera más importante de este período: el Casino, los trabajadores de los "call center", los de los supermercados; los conflictos obreros son dirigidos, en su inmensa mayoría, por jóvenes sin gran experiencia sindical, pero con una voluntad de lucha que los postulan como el futuro del modelo de la clase obrera. Tienen dos cuestiones en común: un repudio generalizado a los métodos de flexibilización laboral y un gran desprecio por la burocracia sindical a la que ven actuar directamente contra las huelgas y en defensa de las patronales.

Mantengamos el sistema de asambleas casi diarias que se ha instaurado, fortalezcamos el Boletín de informaciones de la lucha, que anuda lazos con los compañeros que no están en el piquete, pero se niegan a ir a trabajar a un Casino militarizado. El Boletín, entregado en la casa de cada trabajador, mide nítidamente el verdadero espíritu que reina entre los compañeros. Mantengamos y fortalezcamos el acampe, rodeándolo de solidaridad, impulsando otras movilizaciones y continuando el asedio a una empresa que está perdiendo millones de pesos con la huelga. Estas son las principales llaves para obligarlos a negociar.

Juan Ferro